El proyecto surge de la necesidad incentivar el uso consciente de energías alternativas con el objetivo de reducir el impacto humano al medio ambiente, consiste en implementar generadores de energía pizoeléctricos en superficies urbanas con abundante concurrencia como parques, centros comerciales, restaurantes, universidades, pasos cebra, entre otros para almacenar dicha energía en ciertos bancos de batería para abastecer el funcionamiento de semáforos, iluminaria de parques, cargadores de celular o computadores portátiles en lugares públicos, suelos animados con luz propia, etc. Este sistema hace uso de la simple acción del caminar para obtener energía útil.